Mezcla todos los ingredientes húmedos en un tazón grande.
Agrega los ingredientes secos y mezcla bien para crear una masa más espesa.
Con una cuchara para helado, toma la masa y colócala en una charola para hornear, con papel encerado. Estas galletas se extenderán, así que deja espacio entre cada una.
Hornear las galletas durante 17 minutos a 350, busca bordes dorados.